|
INGREDIENTES:
1 pollo mediano
3 manzanas verdes
2 cebollas chicas
2 dientes de ajo
3 cdas. de azúcar rubia
1/2 vaso de vino blanco o sidra
4 rodajas de pan lactal
1 taza de perejil
4 cdas. de aceite de oliva
Ralladura del limón
1 nabo mediano
3 cebollas
3 zanahorias
Aceite de oliva
Sal y pimienta
Jugo de limón
Tomillo fresco
Para pintar el pollo:
1/2 taza de aceto
1 taza de aceite de oliva
1 taza de vino blanco
2 cdas. de miel
Jugo de 1 limón
Limpiar el pollo retirando el exceso de grasa.
Secarlo bien.
Salpimentar muy bien por fuera y por dentro.
Reservar.
Cortar las manzanas en cubos de 2 cm y rociarlas con un poco del jugo de limón.
Picar la cebolla bien chiquita, junto con el ajo.
Rehogar en una sartén con aceite de oliva y cocinar hasta transparentar.
Incorporar las manzanas, espolvorear con el azúcar y dejar caramelizar unos minutos.
Desglasar con el vino blanco, dejar evaporar y cocinar hasta que se evapore completamente el líquido.
Luego, retirar del calor y colocar en un tamiz para recuperar Los jugos que se desprendan.
Cortarle la corteza al pan lactal y procesar muy bien la miga.
Mezclar la miga procesada con las manzanas y agregar el perejil y el jugo de limón.
Chequear nuevamente la sazón y rellenar el pollo haciendo presión hasta que la cavidad esté completa en sus tres cuartas
partes.
Lavar, pelar y cortarlas verduras de tamaño parejo. Untarlas con aceite de oliva, salpimentar y disponer en una placa
para horno.
Acomodar el pollo en el centro.
Mezclar el aceto con el vino blanco, la miel, el jugo de limón y el aceite de oliva.
Con esta mezcla, pintar muy bien toda la superficie del pollo.
Agregar unas ramas de tomillo frescas y cocinar en horno fuerte los 30 primeros minutos.
Luego bajar el horno a mediano y cocinar por 1 hora más. Controlar que la preparación no se quede sin líquido (en ese
caso ir agregando un poco de agua tibia y seguir pintando con el aceto con vino).
El pollo estará cocido cuando, al pinchar los muslos, el líquido que salga sea clarito.
Colocar el pollo con las verduras en una fuente grande. Dividir en porciones y servir en cada plato el pollo con un poco
del relleno y con verduras.
EL SECRETO
A la hora de elegir un pollo hay que tener en cuenta la cantidad y el color de su grasa. Para que esté en buenas condiciones,
procurar que la piel sea lo más fina posible (cuánto más traslúcida mejor). Y tener en cuenta que si tiene una capa de agua
gelatinosa significa que va a perder mucho líquido durante la cocción y, por ende, peso.
EL TRUCO
Para cortar el pollo cocido y separar las piezas de manera ordenada, retirar primero los muslos (con cuidado de no dejar
el lomito en el hueso). Luego separar la pata del muslo. Cortar las alitas sin romper la pechuga. Separar las pechugas de
las espalda del pollo y después entre sí. En el caso de que sea relleno, filetearlas pechugas en láminas.
|
